Campeche ofrece, además de sus Baluartes y Playas una ruta por distintas zonas arqueológicas llamada la “Ruta de los Chenes” la cual está compuesta por los sitios arqueológicos de Hochob; Dzibilnocac; Tabasqueño y Tohcok.
El término “chenes” proviene de la palabra yucateca que significa “pozo o cueva con agua”. Debido a que en esta región no abundan las formaciones de agua llamadas cenotes como en Yucatán y para sobrevivir tenían que almacenarla en cavidades artificiales conocidas como “Chultunes”.
La arquitectura del recorrido de los Chenes presenta una gran cantidad de elementos decorativos. Las fachadas de los sitios arqueológicos tienen grandes mascarones zoomorfos y en varias entradas de éstos hay talladas fauces de algún animal.
Inicio de la ruta de los chenes
Xochob
El recorrido da inicio en la zona arqueológica de Xochob, que significa “lugar de las mazorcas de maíz” en maya. El sitio se encuentra asentado sobre una explanada rectangular la cual sirve como base del grupo estructural que conforma el sitio.
Aquí puedes ver la Plaza I que es la principal, el Palacio del Este o Estructura I que cuenta con tres aposentos, y al norte el Palacio Principal o Estructura II con un maravilloso mascarón de Itzamná a la entrada. La Estructura III está un poco alejada del grupo estructural central.
En varias partes de la zona podrás ver los “chultunes” los cuales sorprenden por su profundidad y el acabado tan singular de los agujeros, que eran recubiertos por estuco para evitar que el agua se llenara de tierra. Era un trabajo muy especializado.
Dzibilnocac
Luego de recorrer esta zona, la siguiente parada será Dzibilnocac, cuyo significado es “bóveda pintada”. Durante el trayecto podrás ver algunas viviendas tradicionales mayas, así como campos de granjeros menonitas que se han asentado en estas tierras.
En Dzibilnocac podrás ver su plataforma central la cual está rodeada de prados y jardines, y destaca el Templo Principal en cuya parte superior hay una fachada decorada con mascarones del dios Chaac (Dios de la lluvia).
Esta área central fue utilizada para las actividades ceremoniales; el sitio está complementado por montículos que originalmente fueron basamentos, importantes pirámides, enormes plataformas, bellos edificios abovedados y decenas de estructuras habitacionales.
El Tabasqueño
A tan sólo tres kilómetros de Dzibilnocac se localiza la zona arqueológica El Tabasqueño, la siguiente parada de la ruta de los Chenes. En el centro de este sitio hay una plaza delimitada en sus cuatro lados por edificios particularmente característicos del estilo predominante en este lugar. A un costado sobresale un templo, asentado sobre un edificio de una planta, con ocho aposentos y una amplia escalinata central.
En el templo se pueden apreciar decenas de mascarones de Chaac y a un costado del palacio hay una torre de poco más de 4 metros de altura la cual, parece ser una estela hecha de mampostería.
Tahcok
Por último, para terminar la ruta se visita el sitio de Tahcok. El lugar alberga un enorme palacio que conserva en perfecto estado sus columnas y habitaciones. En este palacio se pueden ver los arcos mayas tradicionales y todos los detalles de ornamentación. La zona está complementada por varias estructuras piramidales y diversos montículos, que en su momento sostenían estructuras y edificios espectaculares, y hoy han quedado en el olvido.
Para considerar:
La ruta de los Chenes es un trayecto que es indispensable hacerla en vehículo, ya sea propio o rentado.
Es recomendable visitar los sitios arqueológicos en domingo si eres nacional, así evitarás pagar cualquier cargo.
Lleva siempre contigo repelente, una botella de agua, lentes de sol y sombrero. No te olvides de aplicarte bloqueador solar.
Usa zapatos cómodos y no te olvides por nada de tener tu cámara fotográfica bien cargada para captar los mejores momentos de este viaje.
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