Ciudad de México, vibrante metrópoli con una rica historia deportiva, alberga tres espectaculares estadios de fútbol donde los aficionados ven fútbol libre en vivo cada dos semanas. Cada estadio tiene su propia historia y acoge regularmente partidos de la Liga MX, la liga de fútbol más prestigiosa de México.
Ciudad de México alberga tres espectaculares estadios de fútbol, cada uno con su propia historia, y cada uno de ellos acoge regularmente partidos de la Liga MX, la liga de fútbol más prestigiosa de México.
El Club América, los Pumas UNAM y el Cruz Azul son tres de los equipos más grandes de la historia del fútbol mexicano. Todos ellos han ganado ya varias veces el campeonato de la Liga MX.
Este artículo te llevará a conocer estos emblemáticos estadios: Estadio Azteca, Olímpico Universitario y Estadio Ciudad de los Deportes.
Sus estadios son parte importante de la historia del deporte mexicano, y todos ellos son destinos estupendos para visitar en tu viaje a Ciudad de México.
Estadio Azteca
Equipo: Club América
Aforo: 87.253 espectadores
El más famoso de todos los estadios de fútbol mexicanos es, sin duda, el Estadio Azteca. Con una impresionante capacidad de 87.253 espectadores, se erige como una maravilla arquitectónica en la zona de Santa Úrsula.
La construcción comenzó en agosto de 1962 con explosivos que preparaban el terreno rocoso para el futuro estadio (el campo está a 9,5 m por debajo del nivel del suelo). En mayo de 1966 la mayoría de las partes estaban listas, pero algunas secciones, como la terminación del tejado, tardaron un año más.
Diseñado originalmente por los arquitectos Vázquez y Alzérrega, inicialmente albergaba a más de 107.000 personas, pero este número ha disminuido con el tiempo debido a las modernas normas de seguridad. Sin embargo, sigue contando con una de las zonas premium más grandes del mundo, con 856 palcos privados para clientes corporativos. A pesar de tener una historia más corta que muchos otros estadios emblemáticos de todo el mundo, el Estadio Azteca ha albergado acontecimientos deportivos a gran escala, como dos finales de la Copa Mundial (1970 y 1986), los Juegos Olímpicos de Verano (1968) y los Juegos Panamericanos (1975), entre otros, además de cientos de partidos de fútbol mexicano.
Aparte del deporte, también ha sido escenario de conciertos multitudinarios.
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Olímpico Universitario
Equipo: Pumas UNAM
Aforo: 72.000 espectadores
El Olímpico Universitario, con capacidad para 72.000 espectadores, es otro de los estadios emblemáticos de Ciudad de México. Es la sede del equipo de la Liga MX Pumas UNAM.
Construido entre 1950 y 1952 sobre una tosca base volcánica, su forma se asemeja a un volcán con el terreno circundante cubierto de piedras de magma. Un famoso mural de Diego Rivera adorna la parte oriental del estadio.
Cuando se terminó en 1952, era el estadio más grande de México. Su capacidad se amplió para los Juegos Olímpicos de 1968, pero posteriormente se redujo. El estadio también ha albergado otros acontecimientos deportivos populares cada año.
Desde 2007, el estadio, junto con otros edificios del campus de la UNAM, tiene el honor de figurar en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Estadio Ciudad de los Deportes
Equipo: Cruz Azul
Aforo: 33.000 espectadores
Construido en 1946 y actual sede del equipo Cruz Azul, el Estadio Ciudad de los Deportes es otro destino futbolístico de visita obligada en Ciudad de México.
Originalmente conocido como Estadio Olímpico de la Ciudad de los Deportes, albergó por primera vez un partido de fútbol americano antes de que el fútbol asociación se convirtiera en el deporte principal. Con sus gradas en forma de cráter y sus pendientes pronunciadas, que ofrecen buenas vistas a los espectadores, este tercer estadio más grande de Ciudad de México puede albergar hasta 33.000 espectadores.
A lo largo de la historia, varios equipos de dentro y fuera de la Ciudad de México han utilizado este recinto, incluido el Club América hasta 1955. Los actuales inquilinos, el Cruz Azul, incluso cambiaron una vez el nombre del estadio por el de Estadio Azulgrana, y más tarde por el de Estadio Azul, antes de devolverle su nombre original.
Los tres estadios son maravillosas obras de la arquitectura mexicana que merece la pena visitar durante cualquier viaje a Ciudad de México, tanto si se es un ávido aficionado al deporte como un turista ocasional. Su rica historia y sus estructuras únicas los convierten en algo más que simples recintos deportivos: son lugares emblemáticos que cuentan la historia del patrimonio deportivo de México.
Autor: Craig Resnik-Hanson, Sports Journalist
