Los estadios de fútbol y el turismo se han conectado desde la primera vez que el planeta sintió pasión por dicho deporte. Por ello, uno de los países que más alberga turistas fanáticos del fútbol es Inglaterra, ya que se trata de la cuna del deporte y el país donde se ubican muchas de las catedrales del fútbol mundial.
La historia detrás de los estadios forma una parte importante del fútbol mundial. Pues solo basta con acceder a portales de pronósticos deportivos como Sportsbet.io para notar que los estadios con más historia son un factor importantísimo para el resultado de los partidos. De hecho, las estadísticas en estadios como el Maracaná demuestran cómo la historia pesa sobre el equipo visitante, siendo una fortaleza para el equipo local.
En la pequeña ciudad de Southampton, podemos descubrir que las paredes del estadio ST Mary’s encierran más que solo gritos de gol. Se trata de un pequeño recinto que reúne una gran lista de detalles históricos tanto de la ciudad como del mismo club. En general, se trata de un estadio construido armónicamente para darle honor a la historia de los Saints.
Nacimiento luego del Tailor Report
Tras la tragedia ocurrida en el año 1989 en la cual 96 aficionados del Liverpool murieron aplastados tras el derrumbe de una grada, nace el informe que obligaría a los clubes a realizar reformas estructurales a sus estadios. En dicho informe, se impuso el cumplimiento de ciertas garantías de seguridad para los fanáticos, algo que repercutió en el antiguo estadio de los Saints.
Debido a la necesidad de poseer más de 15 mil butacas, el Southampton tuvo que abandonar su antigua casa The Dell. Para escoger la ubicación del nuevo recinto, decidieron construir justo al lado del río Itchen, en el centro de la ciudad. La infraestructura debía ser cerrada y albergar más de 25 mil fanáticos, algo que el club pudo sintetizar a la perfección. El proyecto inició en 1999 y tuvo un coste total de 32 millones de libras, luego fue inaugurado en el 2001 en un partido amistoso frente al Espanyol de Barcelona.
El nombre del recinto provino gracias a la histórica iglesia que se encuentra a escasos metros del Stadium. Asimismo, cada una de las gradas representa un nombre según su ubicación. Por ejemplo, la grada principal se llama Itchen Stand, debido a que se encuentra de espaldas al río Itchen. Las otras tres gradas son llamadas Kingsland Stand, Northam Stand y Chapel Stand.
Un estadio apegado a la tradición del club
Una de las más interesantes características de este estadio es la conservación de la tradición de los Saints. En un principio, el club planeó nombrar al estadio mediante un sponsor, idea a la cual tuvo que desistir luego de que los fanáticos demostraran su inconformidad. Hasta la fecha, el Southampton conserva su promesa ante sus fanáticos de conservar el nombre del estadio.
Otro dato curioso es que en la Itchen Stand se encuentran las oficinas del club y las suites construidas en memoria de los futbolistas históricos del club. Entre los nombres que se pueden reconocer de las suites destacan Bobby Stokes, Matt Le Tisier y Terry Paine. Además de las suites, también se pueden encontrar los vestidores y áreas comunes del club.
Otro monumento histórico del St Mary’s Stadium es la estatua construida en 2007 del icónico Ted Bates, el cual fue jugador, entrenador y presidente del club. Al igual que en la elección del nombre la estatua causó inconformidad entre los fanáticos, ya que estos aseguraban que no se parecía lo suficiente a la leyenda del club. Luego de ello, fieles al compromiso con sus fanáticos, la directiva decidió cambiarla por una que representara mejor a Bates.
Hasta la fecha, todos los sectores del estadio conservan el modelo del proyecto original, así como también cada una de las zonas históricas del recinto. Gracias a ello, es bastante visitado por los turistas que acuden al centro de la ciudad portuaria a conocer.-I.S.
